Creada por la cadena de televisión USA Network, “Los 4400”, o “The 4400” en su idioma original, fue una serie de televisión escrita por Scott Peter y René Echevarría. Los encargados de producirla fueron la cadena CBS, en colaboración con Sky Teevision, American Zoetrope y Renegade 83.
Ambientada en Seattle (Estados Unidos), la serie rodaba en Vancouver, en la canadiense Columbia Británica. Se estrenaba en Estados unidos en 2004 en formato de miniserie, pero fue tal el éxito que acabaron producirse tres temporadas que los espectadores esperaban ansiosos.
En la cuarta temporada, emitida en 2007, la producción perdía audiencia, de modo que, tras ofrecerse la última entrega el 16 de Septiembre, se cancelaba de manera oficial el 18 de Diciembre. Pero los fans no estaban contentos con esta historia inconclusa, de modo que se publicaron, en 2009, dos libros que continuaban la trama donde la cruel televisión la había interrumpido.
Un regreso inesperado
La historia de “Los 4400” es la de otras tantas personas abducidas que desaparecieron durante años y que regresan al planeta Tierra. La trama comienza con una bola de luz que cambia repentinamente de rumbo y se dirige haca el Planeta Azul. Este hecho desencadena el pánico, pues la Humanidad se espera una catástrofe de dimensiones incalculables.
Lejos de producir el Apocalipsis, la esfera se frena y se posa sobe las aguas de un lago al noroeste de Estados Unidos. 4400 personas surgen de la cegadora luz blanca. Personas de todas las edades y condiciones sociales a los que se creían muertos o definitivamente desaparecidos.
Misterios y más misterios
Nadie recuerda dónde ha estado, y todos ellos han de regresar a una vida que, en su ausencia ha seguido adelante. Es más: algunos se han perdido décadas, a pesar de no haber envejecido un solo minuto. Incluso, algunos de los abducidos parecen haber adquirido habilidades extrañas.
De esta forma, estas 4400 personas se ven abocadas a vivir en un presente del que, en muchos casos, no saben nada. Y han de hacerlo en un mundo que duda si adorarlos o temerlos, con lo que opta por hacer ambas cosas a partes iguales.
Por su parte, el Gobierno empieza a investigar a estas personas con el objetivo de aclarar dónde han estado y por qué han vuelto. Entre otros motivos porque su presencia amenaza con cambiar a la Humanidad como nunca, ningún otro acontecimiento, lo había hecho.
