Hace unos días estuve tomando algo con un amigo y, como no podía ser de otra forma, acabamos hablando de las míticas películas de ciencia ficción. Tras un buen rato discutiendo, imitando personajes y rememorando escenas míticas. Acabamos con nuestras diferencias escribiendo las que para cada uno eran nuestros Top Ten de películas imprescindibles.

Nos dimos cuenta que ambos teníamos las mismas, uno arriba otro abajo: Encabezadas por Matrix, Alien, Blade Runner y, como no podía ser de otra forma, un gran despliegue de la saga de la Guerra de las galaxias.

Ahí fue cuando nos dimos cuenta el pedazo de industria que se había montado en Hollywood con este tipo de películas y nos aterramos en darnos cuenta de que no podía ser que no hubiera ninguna otra extranjera, que ya no española… Que mereciera estar en las finalistas.

Mirando listas de Internet nos dimos cuenta que nos habíamos saltado peliculones del tipo  la gran “2001: Odisea en el espacio” (Inglesa) o “El quinto elemento” (francesa). Pero la lista era interminablemente americana.

Seguimos y aparece un clásico, la parcheada pero aun así obra de arte alemana “Metrópolis” y un aceptable “Distrito 9” (una extraña unión sudafricana-neozelandesa). Pero de repente nos encontramos con casi al final de una lista de 60 películas una que no conocíamos: “Solaris”, Soviética. Empezamos a investigar sobre ella.

“Solaris” 1972

Se trata de una película basada en la novela del escritor polaco Stanislaw Lem. Dirigida por Andéi Tarkovsi, uno de los escritores soviéticos más importantes de la historia del cine que, sorprendentemente, aunque sombría y dura, tiene una gran belleza minimalista.

El argumento

Solaris habla sobre las relaciones entre distintos seres humanos cuando alcanzan los deseos materiales tan necesarios en nuestra sociedad, en un entorno totalmente desconocido.

Esta es la tarea que pretende desarrollar un científico enviado a un planeta extraño cubierto en su mayoría de agua, donde tendrá que descubrir cuáles fueron las causas reales de la muerte de un médico allí.

“Solaris” 2002

Investigando nos damos cuenta de hay una nueva versión de este clásico, inspirado tanto en el libro original como en la película de 1972. En este caso, como no podía ser de otra forma, es una película de origen estadounidense, en 2002. Dirigida por Steven Soderbergh y que tiene como productor ejecutivo James Cameron, que aunque no quiso rodarla, de esta forma también participo en la película.

Sabiendo estos datos, creo que es una buena forma de ver este clásico y compararlo con la versión más actual. Sobre todo porque el primero, que esta rodado en la antigua U.U.R.S.S, da la sensación de tener gran carga ideológica comunista. Algo que nos llena de curiosidad por ver como resuelve un país como EEUU, cuna del capitalismo.